Sus Ahorros – Buenos Para Usted, Su Familia y Su Tranquilidad de Espíritu
Sheila Bair, Presidente de la FDIC
Cuando Juan tuvo que reparar la transmisión de su automóvil hace tres años, usó su tarjeta de crédito para pagar la factura de $1,000. Cuando por fin terminó de pagar el cargo el mes pasado, a una tasa de interés del 15 por ciento, la reparación realmente le había costado la friolera de $1,248.
Si hubiera tenido ahorros que aprovechar, la transmisión todavía le habría costado $1,000. Pero los otros $248 que pagó en interés a la compañía de tarjetas de crédito se habrían quedado en su bolsillo. O mejor aún, en una cuenta de ahorros que le pague el interés a él.
Aunque sean pequeños, los montos que se guardan en fondos de reserva para cubrir gastos de emergencia o para ahorrar para futuras compras pronto se acumulan. Y lo mejor es que usted puede obtener un poco de interés por el dinero.
Hay muchas formas de empezar a ahorrar. Por ejemplo, el año pasado casi 24 millones de trabajadores recibieron un crédito tributario, llamado el Crédito Tributario por Ingreso del Trabajo (Earned Income Tax Credit), para personas de ingresos bajos y moderados. Las personas elegibles para el crédito recibieron un promedio de $2,000 del gobierno federal. Si usara la mitad de los $2,000 para comprar un bono de ahorros que devenga un interés del 3 por ciento, en dos años acumularía $1,061 simplemente dejando que el dinero trabajara por usted.
O bien podría abrir una cuenta de ahorros con los $1,000 de su reembolso de impuestos y agregarle $10 por semana eliminando gastos como los de la máquina expendedora u opciones del teléfono celular que no usa. Al cabo de los mismos dos años tendría $2,133. Este hábito de ahorrar podría hacerse más fácil inscribiéndose en un plan de ahorros automáticos, si su empleador ofrece uno, o pidiendo a su banco que transfiera automáticamente una porción de su paga a una cuenta de ahorros, si usa el depósito directo.
Los fondos de reserva son esenciales para cubrir gastos inesperados o pérdidas de ingresos. Los ahorros personales también les permiten a las familias financiar las metas a largo plazo, como la educación universitaria de un hijo o la cuota inicial para comprar una casa. Además, los ahorros son esenciales para garantizar una jubilación segura. De hecho, son tan esenciales que muchos empleadores igualan una parte del dinero que sus empleados ahorran para su jubilación. Por ejemplo, si usted ahorra $20 al mes, su empleador podría depositar otros $20 en su cuenta de jubilación.
El dinero no puede comprar la felicidad por sí solo, pero las investigaciones indican que la protección que nos dan los ahorros en realidad pueden brindar beneficios tales como la reducción del estrés y mejores relaciones con la familia.
Desafortunadamente, en muchos hogares las personas no están preparadas para gastos no planeados. Y tampoco están ahorrando para sus metas futuras. Según una encuesta realizada el año pasado por la Harvard Business School y el Dartmouth College, sólo una cuarta parte de los estadounidenses dijeron que estaban seguros de poder obtener $2,000 en 30 días, lo cual significa que hasta el 75 por ciento—como Juan—podrían tener que recurrir a costosos préstamos si enfrentaran una emergencia económica.
Sin embargo, también hay buenas noticias en cuanto a los ahorros. La tasa de ahorros del país subió al 4.6 por ciento en 2009, comparada con la tasa del 1.4 por ciento en 2005, la más baja jamás registrada. Depende de cada uno de nosotros si dura esta tendencia de ahorrar para los gastos inesperados – y para los grandes sueños.
Ahora es el momento de actuar para asegurar que los hábitos positivos de ahorrar continúen. La semana del 21-28 de febrero se ha denominado "America Saves Week." Tiene por objetivo concientizar sobre la necesidad de ahorrar dinero, reducir deudas y crear la riqueza. Es una gran oportunidad para que actúen las familias, abriendo una cuenta de ahorros y formando el hábito de ahorrar, porque unos pocos dólares pueden significar mucho.
Es muy fácil y seguro abrir una cuenta de ahorros en un banco, y su dinero está asegurado por el gobierno de los Estados Unidos. Si quiere comprar un bono de ahorros respaldado por el gobierno, puede hacerlo al llenar los formularios de los impuestos federales, en algunos bancos o directamente a través del U.S. Department of Treasury (Departamento del Tesoro de los Estados Unidos) en www.treasurydirect.gov o al 1-866-388-1776.
Animo a todos los estadounidenses a acompañarme a mí y a mi familia en renovar nuestro compromiso de ahorrar durante la semana de "America Saves" y a resolver mantener este compromiso durante los años venideros. La reciente crisis económica demuestra los peligros de los préstamos excesivos y la importancia de contar con recursos de respaldo en tiempos de dificultades económicas. Ahorrar dinero fortalece a nuestras familias y a nuestro país. Encontremos un equilibrio mejor entre los ahorros y el consumo, y pidamos préstamos sólo cuando sea necesario, para ayudar a asegurar un futuro financiero mejor para nosotros y para nuestros hijos.
Sheila Bair, Presidente de la Federal Deposit Insurance Corp. (Corporación Federal de Seguros de Depósitos) desde 2006 y madre de dos hijos en edad escolar, es una defensora apasionada de la protección al consumidor y de la inclusión económica. Por mucho tiempo ha trabajado por integrar a las poblaciones subatendidas a la corriente financiera principal.
La FDIC es una agencia independiente creada por el Congreso para mantener la estabilidad y la confianza pública en el sistema financiero de la nación. La FDIC asegura los depósitos en bancos e instituciones de ahorros por un mínimo de $250,000; examina y supervisa las instituciones financieras para su seguridad y solvencia y para la protección al consumidor; y trabaja para limitar el efecto en la economía y en el sistema financiero en caso del cierre de un banco o institución de ahorros.